Denuncia por los cargos de Unidades de Gestión Clínica
SATSE recurre ante el Constitucional los nombramientos a dedo de cuatro cargos del Virgen del Rocío
El Sindicato de Enfermería (SATSE) de Sevilla ha presentado un recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional por los nombramientos a dedo de cargos intermedios en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla. En concreto, SATSE ha recurrido una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) que daba la razón al Servicio Andaluz de Salud (SAS) sobre la convocatoria, mediante el sistema de libre designación, de cuatro plazas de jefes de bloque de enfermería del Hospital Virgen del Rocío, en contra del dictamen de sentencias anteriores.
El motivo principal del recurso al Constitucional, según detalla el Sindicato de Enfermería, es que la sentencia del TSJA obvia la nulidad plena, por sentencias anteriores del propio Alto Tribunal andaluz, del artículo 8 del Decreto 75/2007, por el que se regulaba el sistema de provisión de puestos directivos e intermedios de los centros sanitarios del SAS, que es el que habilitaba a la Dirección del Virgen del Rocío para convocar las plazas por el sistema de libre designación.
De igual forma, continúa SATSE, la sentencia tampoco tiene en cuenta la vulneración por parte del centro hospitalario del artículo 28.1 de la Constitución en cuanto al derecho de libertad sindical, en su vertiente de información y participación en la modificación de las condiciones de trabajo. Según apunta el Sindicato de Enfermería, los puestos de Unidades Clínica de Gestión son inexistentes en la plantilla orgánica del Hospital al no existir normativa que las regula y, por tanto, no pueden constituirse sin audiencia previa del sindicato tal y como se ha hecho.
Desde marzo de 2010, el Sindicato de Enfermería ha presentado impugnaciones a un total de 79 convocatorias de cargos intermedios de Unidades de Gestión Clínica de centros del SAS de la provincia de Sevilla, muchas de las cuales ya han sido anuladas en los tribunales que consideraban que se estaba incurriendo en un fraude de ley. Para SATSE, el modelo de UGC que trata de imponer el SAS fomenta el enchufismo, introduce elementos privatizadores y fragmenta el sistema.