SATSE denuncia el hacinamiento en los pasillos del Hospital de Valme ante la inacción de su dirección

El Sindicato de Enfermería, SATSE, en Sevilla ha denunciado la situación de colapso que vuelven a presentar las urgencias del Hospital Universitario Virgen de Valme con pacientes hacinados en pasillos y salas de espera en condiciones indignas, mientras la dirección y cargos del servicio permanecen impasibles ante una situación que pone en riesgo la vida de las personas y la salud de los profesionales. 

Tal y como detalla la organización sindical, a un fin de semana de completo colapso, la jornada de lunes y en lo que va de martes, persisten los pacientes en tierra de nadie, en pasillos e incluso puertas de consultas durante horas, sin asignación clara ni responsable asistencial, mientras que Urgencias tiene incluso que asumir ingresos programados de Traumatología, una carga que no le corresponde.

En este sentido, SATSE denuncia que lejos de ser un hecho aislado ni fruto de un pico puntual de demanda, la situación de Valme es el reflejo de un mal endémico marcado por la alta frecuentación de las urgencias por la excesiva población que tiene el centro asignada, la desorganización generalizada, la falta de planificación y la improvisación continua. 

Dos áreas de Observación desbordadas, pacientes ubicados en cualquier rincón del hospital y enfermeras trabajando al límite son la imagen diaria de un centro que funciona crónicamente al borde del colapso, apostilla el Sindicato de Enfermería.

Nefasta gestión con consecuencias para profesionales y pacientes

En este entorno laboral, la organización sindical denuncia que son los profesionales de enfermería los que están sosteniendo un sistema roto, asumiendo cargas inhumanas y funciones que no les corresponden, sin protocolos claros, sin liderazgo operativo y sin recursos suficientes. 

SATSE lamenta además que la dirección ha ignorado sistemáticamente los comunicados de riesgo elaborados por las trabajadoras, mientras la situación se agrava cada día. Pacientes sin monitorización, sin material adecuado y sin responsable asistencial claro son la norma en un hospital que ha convertido la improvisación en su único método de trabajo. Esta realidad vulnera la dignidad de los pacientes y expone gravemente la salud física y mental de las enfermeras.

Para SATSE el caos en Valme es consecuencia directa de una gestión desastrosa que ha convertido las Urgencias en un parche permanente para tapar las carencias del sistema. Por todo ello, el Sindicato de Enfermería exige medidas inmediatas tales como el incremento urgente de plantillas enfermeras, protocolos claros ante saturación y planificación real para garantizar una atención segura y digna.

Por último, SATSE concluye reclamando que se depuren responsabilidades comenzando por el cese del equipo directivo y cargos de Urgencias, responsables de esta situación intolerable en la que se está jugando con la vida de las personas y con la salud de sus profesionales.